Qué ver en Santander y alrededores en 3 días

Imagina que estás en Santander, con tres días por delante para explorar esta hermosa ciudad y sus alrededores. Con tanto que ver, es fácil sentirse abrumado. Pero, ¿y si te dijera que existe una manera de aprovechar al máximo este tiempo, recorriendo sus rincones más emblemáticos y disfrutando de la tranquilidad del entorno rural al final del día? Sigue leyendo y descubre un itinerario perfecto que combina lo mejor de Santander y sus alrededores.

Día 1: Descubriendo el corazón de Santander

Paseo por el centro histórico

Comienza tu aventura por Santander explorando su centro histórico. Te recomiendo empezar en la Plaza del Ayuntamiento y caminar hacia la Catedral de Santander, una joya que no puedes perderte. Después, dirígete a la Plaza Porticada y recorre las calles peatonales llenas de vida y tiendas locales.

Paseo Pereda y Jardines

Tras explorar el centro, camina hacia el Paseo de Pereda. Este paseo marítimo es ideal para disfrutar de la brisa del mar y contemplar las vistas de la Bahía de Santander, considerada una de las más bonitas del mundo. Los Jardines de Pereda ofrecen un lugar perfecto para descansar un rato antes de seguir tu recorrido.

Palacio de la Magdalena

Por la tarde, no puedes dejar de visitar uno de los lugares más icónicos de Santander: el Palacio de la Magdalena. Situado en la península del mismo nombre, este edificio te permitirá disfrutar de vistas espectaculares al mar. Además, puedes recorrer el parque que lo rodea y visitar la pequeña zona donde viven pingüinos y leones marinos.

Consejo: Después de un día de caminatas, nada mejor que alojarte en alguna de las casas rurales en Cantabria. Están a pocos kilómetros del centro y te ofrecen un ambiente tranquilo para descansar y recargar energías.

Día 2: Playas y naturaleza en su máxima expresión

Playa del Sardinero

El segundo día empieza en una de las playas más famosas de la ciudad, la Playa del Sardinero. Es el lugar perfecto para disfrutar de un baño o simplemente relajarte en su extensa arena dorada. Si te gusta caminar, el paseo marítimo que bordea la playa te llevará hasta el Parque de Mataleñas.

Faro de Cabo Mayor

Desde el parque, es muy recomendable seguir hacia el Faro de Cabo Mayor, un lugar ideal para sacar fotos impresionantes del paisaje y el mar Cantábrico. La caminata es tranquila y las vistas, espectaculares.

Comillas: Un toque de cultura y naturaleza

Si te apetece explorar más allá de Santander, te sugiero que termines el día en Comillas, a unos 40 minutos en coche. Esta localidad es famosa por su Capricho de Gaudí y por ser un lugar tranquilo, lleno de encanto. Es ideal para pasear y disfrutar de un ambiente más rural. Al final del día, vuelve a tu alojamiento para descansar y prepararte para el último día de aventuras.

Día 3: Picos de Europa y Pueblos con Encanto

Picos de Europa

Para el último día, nada mejor que una escapada a los Picos de Europa, uno de los parques naturales más impresionantes de España. Aunque están un poco más alejados de Santander, bien vale la pena el viaje. Puedes hacer rutas de senderismo adaptadas a todos los niveles o simplemente disfrutar de las vistas desde el Mirador del Cable.

Santillana del Mar

De vuelta hacia Santander, haz una parada en Santillana del Mar, conocido como uno de los pueblos más bonitos de España. Sus calles empedradas, casas de piedra y encanto medieval te harán sentir que has viajado en el tiempo.

Despedida en la ciudad

Termina tu viaje de tres días en Santander disfrutando de una cena en alguno de los restaurantes del centro, saboreando platos locales como las rabas o el cocido montañés. No hay mejor manera de cerrar tu visita.

Dónde alojarte durante tu estancia

Si te preguntas dónde puedes descansar después de estos días llenos de aventuras, te recomiendo optar por alojamientos en Santander o por casas rurales en Santander y sus alrededores. Estos alojamientos ofrecen tranquilidad y contacto con la naturaleza sin alejarte demasiado de la ciudad.

Explorar Santander y sus alrededores en tres días es completamente posible. La combinación de cultura, naturaleza y tranquilidad rural hará que cada día sea una experiencia inolvidable. Ahora que sabes qué ver en Santander, solo falta que elijas el alojamiento perfecto para completar tu viaje. ¡No lo pienses más y empieza a planear tu escapada!